Llevo días sin escribir ni una sola puta palabra, no no señor no fue falta de inspiración, es falta de decisión.
Mirando por mi ventana pasa ella, la superficial y escaladora de la pirámide social a costa del cuerpo y su virtud, tal cual lo exige el machismo en la sociedad. Ella de la cual una vez estuve enamorado, camina a disgusto con él dueño del cielo y de la tierra y que te promete que en el mundo de lo superficial el amor tiene algo de comercial.
Una procesión que me anima a tomar una ducha, hay como dice Coné, malentendiendo a Julio Verne, 40.000 lenguas de viejas gritando por marido, disfrazando las ganas con dogma y religión y convirtiendo al Cristo en objeto de deseo oculto. En la cabeza de la procesión presentes los ultra derecha con sotana, dueños de la entrada al cielo, de casas autos y al menos 3 hijos nunca reconocidos.
Y aquí adentro antes de tomar la ducha el del espejo, viendo sin mirar un noticiero con que hace oposición abierta y atrincherada en el comercio y en las órdenes de los patrones, el del espejo renegando por tanta mierda irresponsable dicha en “medios de comunicación”.
Y aquí adentro se puede respirar soledad que es la mejor compañera que he encontrado, no no me compadezca ni me crea autista, nada de eso solo que no todos venimos a estas tierras precisamente a encontrar pareja, aunque yo ya encontré la mía. La morena más bonita, original, autóctona y compleja que el mundo pueda dar y yo con ella me quiero quedar y morir en sus brazos.
